El momento
Ha llegado el fin de semana, por fin. Toda la semana corriendo, arriba, abajo, de casa al trabajo, del trabajo a casa, sin parar, con prisas. Pero hoy no. Hoy, al fin, tendré la paz suficiente para sacar mi tablero de ajedrez. Después de toda la semana, me toca, ¡ya era hora!, es mi momento.